Cada noche al abrazarme a mi cojín pienso en ti, y con mi cara de tonta creo que es imposible más, que ya has llegado al máximo, que es alucinante todo lo que consigues en mi , como me haces feliz, como te quiero, y empiezo a creer que es imposible que todo eso siga creciendo.
Pero al final siempre pasa lo mismo.
Me levanto a la mañana siguiente aun abrazada al cojín, pensando en ti y cuando vuelvo a mi cama siempre pienso lo mismo que la noche anterior. Cada día me vuelves más loca, cada día tu perfección aumenta más y más, te superas amor, me superas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario